Las trágicas muertes de algunos metaleros famosos y de estas situaciones inesperadamente acercaron a ciertas personas a Dios.
- Catagoría: Musica y Cultura
- Autor: Jorge Mario Marin
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A principios de los noventa era incesante la pregunta sobre si la banda más importante del mundo (dentro del terreno del rock pesado) eran los glamer callejeros de Guns N Roses o los trashers de Metallica (Nirvana apenas comenzaba a salir del underground).
A decir verdad mi interés por la banda nunca fue muy alto, sus trabajos And Justice For All y Black Álbum, son mis discos favoritos del grupo, posterior a ello nunca fueron de gran interés en mi vida.
Lo cierto es que gustos aparte, la imagen de Cliff Burton, bajista de Metallica siempre ha sido vista como icono del speed y el trash metal, así como un mártir en la historia del rock.
Esta banda se convirtió en pionera indiscutible de esta nueva modalidad de heavy metal más extremo, caracterizado por una imagen más agresiva tanto en imagen como en letras, que contrastaba con la colorida y fiestera de las de glam metal. Sus líricas se enfocaban en temas más sociales, aunque cabe recordar que los también pioneros de Stone Vengeance, fueron de las primeras bandas de esta categoría en tratar temas sobre cristianismo antes de que lo hicieran Deliverance o Vengeance Rising.
Desde los primeros años, las situaciones alrededor de estos músicos norteamericanos no fueron fáciles, por esa época se vieron forzados a despedir a su guitarrista Dave Mustaine por problemas con el alcohol y su actitud violenta. El equipo posteriormente conforma la también potente agrupación Megadeth.
Posiblemente, nadie se imagina por aquel entonces encontrar la narración del Salmo 23 en un disco de Megadeth, pero es así como sucede en el álbum The System Has Failed del 2004, después de la conversión al cristianismo de Dave.
La parte más fuerte de esta historia de Metallica, es el hecho de que en esta ocasión no fueron las drogas o el alcohol quienes se llevaron la vida del bajista, sino un trágico accidente de tráfico el que aún hoy no está del todo esclarecido.
Una noche de septiembre de 1986, en una gira por Estocolmo, pierde la vida Cliff Burton en el momento en que el autobús en el que se encontraban pierde el control y se desvía de la carretera. Después de dar varias vueltas Burton sale del vehículo, cuando los integrantes de Metallica logran reaccionar un poco encontraron a su compañero de banda con las piernas saliendo por debajo del autobús.
El desesperado intento por rescatarlo solo consigue que el vehículo vuelva a caer a tierra y termine de aplastar el cuerpo de Burton. James Hetfield le grita incesantemente al conductor, quien en su defensa afirma que tan solo intentó esquivar un bloque de hielo. A pesar del shock del momento James decide regresar a la carretera pero no encuentra indicios de ello.
El documental The Salvation Kingdom realizado por su hermana Connie Burton es posiblemente el más atípico en la historia de este género.
En esta ocasión, como tal vez se espera, no son músicos de otras bandas quienes hablan del legado que el músico dejó, más bien lo hacen pastores, músicos de alabanza e incluso una banda de rock cristiano llamada Digital Panic.
Después de exponer la influencia de Cliff y Metallica, hablan acerca de la importancia de un acercamiento personal con Dios por medio de Jesucristo.
La parte más emotiva por supuesto es cuando Connie habla de la vida y relación que sostuvo con su hermano fallecido, así como encontró posteriormente a su muerte un refugio en Dios.
Entre las revelaciones más interesantes sobre la vida del músico, se encuentran su poco interés en algún tipo de ocultismo, el cual se manejaron otras bandas de la época. Aunque si le interesaban las predicas del pastor Billy Graham, de quien afirma que en alguna ocasión le dijo que se dedicó a verlas por tv ya que sentía que estaba encontrando algo en su vida.
A pesar del dominio en los listados del rock de los 90s por parte de las bandas de grunge, algunas agrupaciones metaleras decidieron dar la batalla, entre ellas se encontraban los texanos de Pantera, quienes con su groove trash metal lograron posicionarse ganando un público fiel mientras lograban fama fuera del escenario con sus excesivas fiestas.
Uno de los músicos más destacados dentro del grupo era por supuesto su rápido guitarrista Dimebag Darrel.
El 8 de diciembre del 2004, curiosamente la misma fecha del asesinato de John Lennon, el músico se encontraba dando un concierto con su banda alterna Damageplan, en un momento en el que tras muchos problemas internos se encontraba incierto el futuro de Pantera, nadie se imaginó el escalofriante hecho que ocurrió esa noche.
Un hombre llamado Nathan Gale sube abruptamente el escenario alrededor de las diez de la noche para asesinar a quemarropa a Darrel, posteriormente también le dispara a dos fans y un guardia de seguridad de la banda, todos pierden la vida ese día.
Después de un rato de total desconcierto, un oficial de policía sube al escenario para disparar al asesino, quien se encontraba amenazando a un rehén.
La fuente oficial revela que el asesino sufre de esquizofrenia, aunque como suele pasar en este tipo de acontecimientos, otras teorías salen posteriormente.
Una de las personas que estuvo presente en este triste incidente es el músico Aarón Benner, quien en ese momento pertenecía a la banda Liquid6Teen y quien se encontraba saliendo del anonimato a la fama.
Este hecho cambia totalmente la perspectiva de vida del cantante, después de mucho tiempo de introspección abandona su grupo musical y decide que su talento debe ser usado para compartir la fe en Jesús.
A partir de ese momento comienza la búsqueda de músicos que comparten su misión, posteriormente empieza a darle forma a un nuevo proyecto musical llamado This Fires Embrace.
La banda tiene un éxito que le permite salir de gira por Estados Unidos al igual que parte de Europa y participar de importantes festivales, pero siempre con la motivación de hablar claro sobre Jesús.
A diferencia de vertientes como el rock gótico que suele darle tintes más poéticos y románticos al tema de la muerte, desde su concepción a finales de los sesentas con bandas como Black Sabbath, la muerte es un tema recurrente dentro del metal, como una especie de glorificación y que se toma en términos más desafiantes.
La idea es vivir sin límites, ignorando las señales que nos indican que cruzar la línea puede ser fatal.
Sin embargo, en muchas ocasiones no son los excesos quienes pasan factura, sencillamente la muerte puede llegar cuando menos lo pensamos y en forma fatalista.
Para quienes aún permanecemos es sin embargo más complejo ¿Cómo reponernos ante las pérdidas? Podemos tomar la decisión de darle la espalda a Dios o decidir reflexionar sobre qué camino tomar en lo que resta de nuestro paso por este mundo.
¿Hallaremos esperanza en medio de la tragedia?
Jesús nunca nos prometió una vida perfecta en el que el dolor no nos alcanzara, al contrario, nos advirtió claramente que en el mundo tendríamos aflicción.
La buena noticia viene inmediatamente al afirmar que podríamos confiar que Él ha vencido el mundo.
Después de experimentar el dolor más agobiante para salvarnos de nuestros pecados, Jesús regresa de la muerte para mostrarnos que la esperanza no muere a pesar de las horas más oscuras.
Por @GeorgeRock
Jorge Mario es un super conocedor de la música y en especial del rock y el metal cristiano. Gracias a sus conocimientos fue el director de ZonaJ Muzic por varios años.
