El rock duro se rinde ante el Creador

Dice al final de la canción: “El dinero no puede salvar tu alma, pienso que no es posible, yo miro a Dios y me siento como un pequeño hombre”.

La industria del entretenimiento hace muchas décadas entendió la fuerte influencia que ejerce en el adolescente, al vender la imagen del rock star. El paquete viene completo cuando se combinan el abuso de las drogas, el alcohol, la adicción al sexo, entre otros excesos. Estoy queriendo dar la idea de que estos ídolos son realmente felices.

Todo se resume en los favores que deja el dinero y la fama, la imagen del rockero intocable, poderoso y de mirada salvaje y desafiante, es ya un clásico retrato del hedonismo de Hollywood, principalmente explotada en las bandas de glam metal en el circuito de Los Ángeles en la década de los 80s.

Sin embargo, la triste decadencia ha dejado en la mira del público un resultado muy diferente a lo esperado, con contadas y admirables excepciones. Claro está, algunos de estos músicos se encuentran en la actualidad totalmente perdidos emocionalmente, llegando a su mayoría de edad con un alto historial de divorcios, salud deteriorada y viviendo de glorias pasadas.

Las disqueras son mayormente las responsables de estas vidas arruinadas, aprovechando el natural deseo del hombre por encontrar el éxito y creando en el artista un mundo casi perfecto que pareciera no llegar a un final.

El modelo del rockero rudo llega en momentos a romperse cuando se encuentran cara a cara con el dador de todos los dones, el creador de los talentos en el ser humano.

La banda de shock rock y glam metal, W.A.S.P, fue una de las más censuradas en el juicio que buscó que ciertos discos llevaran la etiqueta de “Parental Advisory” en el año de 1985. Su fuerte puesta en escena les valió una fama que incluso les llevó a una extraña gira con Stryper llamada Heaven & Hell.

Conocidos principalmente por sus letras explícitas en cuanto a temas como el sexo y la violencia, algo que puede ser debatido y analizado de muchas maneras, la banda fue una de las más ofensivas y censuradas de la época dorada de los videoclips musicales, tal vez nadie se imaginaría que actualmente sus últimos dos discos titulados “Babylon” y “Golghota” se encuentran en los listados de algunas páginas que promocionan el “rock cristiano”.

El provocador Blackie Lawless, líder de la agrupación, creció en un terreno bautista, sin embargo, abrazó todo lo que llevaba el circuito del rock, pero actualmente es más conocido por sus declaraciones acerca de su fe que por sus pasados escándalos.

“Un día me di cuenta de que no estaba realmente enfadado con Dios, sino con los hombres que institucionalizaron el pensamiento por el que querían que pasara yo. Y a medida que empecé a volver a mi fe me iba dando cuenta de que no había en la tierra alguien más anti-religioso que Jesucristo mismo. Cuando reparas en lo que les decía él a los legalistas religiosos de su tiempo, te das cuenta de cuánto se enfrentaba a esa gente”.

Afirmaba el músico en una entrevista para la revista TEAMROCK.

Pete Steele de la banda Type O Negative, era todo un sex symbol de su generación, tal vez el mejor retractado en la entrevista que concedió para el patético programa de Jerry Springer. Su potente y particular voz complementaba muy bien el sonido doom gothic metal del grupo, además de su imagen amenazante y siniestra.

Toda esa seguridad y firmeza era a pesar de todo una fachada que se escondía tras sus abusos con el alcohol y poco tiempo antes de su muerte en el 2010, se le había diagnosticado problemas de bipolaridad, por lo cual pasaría varios episodios de su vida en clínicas mentales.

La página web celebatheists.com decide “excomulgarlo” cuando sus declaraciones contradicen el ateísmo de sus primeros años. Sus últimos días de vida fueron conocidos por esa búsqueda espiritual de muchos artistas del rock, que terminó con su conversión al cristianismo.

”Cuando decía que había tocado fondo, no lo decía en el mal sentido, sino en el buen sentido. He encontrado la paz en algo sólido y ahora sé cuál es el sentido de la vida. Siempre había creído que el sentido de la vida era intentar encontrar una razón para vivir. Ahora entiendo que todo este tiempo he estado buscando una razón para morir. Ha estado ahí todo el tiempo, moriré por mi fe, lo haré, lo sé”.

Eso decía para la revista KNAC, que tiempo después es declarado muerto en un hospital por un paro cardiaco.

Brian Head Welch no es un rockero cristiano como muchos que salieron del coro de una iglesia. Su excesiva vida en su carrera como guitarrista de la banda de nu-metal Korn lo llevó a tenerlo todo materialmente y al mismo tiempo a sentirse miserable y atrapado en la drogadicción.

Las palabras de Mateo 11­:28 dadas por un amigo comenzaron a hacer metástasis en el corazón de Brian, reconociendo su triste condición y lo mucho que necesitaba un alivio en su vida.

Las semanas posteriores fueron una mezcla entre leer la palabra y consumir speed, hasta que un encuentro real con Dios cambia su vida de una manera dramática.

Esto forjó un radical cambio en su vida al salir de su banda, dedicar tiempo a su familia, bautizarse en Israel y posteriormente grabar música con un mensaje diferente.

Actualmente ha regresado a Korn pero su perspectiva ante la vida ha marcado un antes y un después en la banda, incluso considera esto una oportunidad de compartir de su fe en este difícil ambiente.

Curiosamente Fieldy, el bajista, es también un creyente en la actualidad.

La dramática caída de muchos de los músicos del rock, es muestra de cómo construimos castillos sobre la arena, cuando el hombre cree que es casi inmortal, pero termina sucumbiendo ante un mundo creado para el simple placer terrenal que tarde o temprano cobra su factura.

Jani Lance de la banda Warrant, pasó sus últimos días de vida siendo apenas la sombra del agraciado cantante que fue en los 80s, no deja de ser conmovedor como una de sus últimas participaciones en el mundo de la música fue colocar su voz en la canción “Sin” para la banda cristiana Liberty and Justice.

Dicho tema era una desgarradora plegaria clamando a Dios por perdón y buscando rendirse a su voluntad. Tristemente fallece supuestamente tras abusos de alcohol, aunque algunas teorías dicen que pudo ser un asesinato como se afirma acerca de muchas estrellas del mundo de la música.

“Digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria, y el hijo del hombre, para que lo visites?”

Clama el salmo 8:4. 

Al final de muchas de estas historias lo que es realmente significativo no es las muchas premiaciones ni la venta de discos, sino el hecho de llegar a los brazos del dador de la vida quien por muy bajo que caigamos siempre está dispuesto a perdonarnos y limpiarnos de cualquier inmundicia, su sacrificio en la cruz se convierte en un acto que da sentido a nuestra existencia.

Por @GeorgeRock
Jorge Mario es un super conocedor de la música y en especial del rock y el metal cristiano.  Gracias a sus conocimientos fue el director de ZonaJ Muzic por varios años.

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